Las técnicas de lipoescultura han evolucionado para facilitar que el cirujano extraiga la grasa con menor dificultad y que los resultados sean más fiables y predecibles. De todas ellas, la única que uso en mi consulta de cirugía plástica en Bilbao es la liposucción asistida por láser, por los beneficios del efecto tensor del calor sobre la dermis de la zona tratada.
La liposucción es un método eficaz para modelar y dar forma a la silueta aspirando la grasa acumulada que no se elimina con ejercicio y dieta. Suele acumularse en caderas (cartucheras), cara interna de muslos, cara interna de las rodillas, zona lumbar, abdomen, espalda, nalgas, pecho, parte superior e interior de los brazos y el cuello.
Liposucción con efecto reafirmante
Con liposucción asistida por láser de alta definición se consigue esculpir con precisión el contorno corporal, marcando musculatura en abdomen, brazos, dorso y piernas. Se protegen el resto de los tejidos y el resultado es más homogéneo, hay menos inflamación postoperatoria y la recuperación es más rápida. El efecto del láser activa las fibras de colágeno y elastina de las capas profundas de la piel, encargadas de dar firmeza y elasticidad a la piel, con claro efecto reafirmante.
Antes de la intervención no sabemos exactamente la cantidad de grasa que vamos a extraer, pero sabemos por la experiencia que siempre extraemos más cantidad de grasa de lo que en un principio puede parecer, aunque lo importante es la forma de la grasa que se deja, a modo de escultura.
La liposucción no es un tratamiento de la obesidad, sino que está destinada a corregir aquellas regiones corporales en las cuales persisten acúmulos grasos habitualmente rebeldes. Las zonas de grasa localizada mejoran visiblemente desde el primer día. Los resultados de la liposucción son mejores en las personas que tienen una piel elástica y tonificada porque se adapta mejor a los nuevos contornos. El candidato ideal para someterse a una liposucción es aquella persona que posee un peso relativamente normal pero que tiene acúmulos de grasa en áreas localizadas.
Los resultados son visibles en el propio quirófano aunque no se deben evaluar los resultados de una liposucción antes de que haya transcurrido un mínimo de tres-seis meses, cuando se reduce la inflamación y la hinchazón. Para ayudar en este proceso de desinflamación, a veces recomiendo a mis pacientes que acudan a un centro especializado en masajes de drenaje linfático.
Lipoescultura con efectos desde el primer día
El tipo de anestesia que se utiliza varía en función de variables que se analizan la consulta: características del paciente, área a tratar y tiempo que vaya a durar la liposucción. Se utiliza anestesia local cuando la liposucción se realiza en áreas pequeñas y si no es común combinar anestesia local y sedación, anestesia epidural o general.
Una vez terminada la liposucción aplicamos vendajes de compresión para que la piel que ha quedado sin grasa se adapte al nuevo contorno de los músculos, al día siguiente a la intervención se coloca una faja especial que cubrirá completamente la zona tratada y se utilizará las 24 horas del día durante aproximadamente 4 semanas, posteriormente se debe utilizar diariamente durante unas horas, cuantas más mejor, ya que la cicatrización continuará hasta 6 ó 7 meses después de la extracción de la grasa sobrante.
Durante los primeros tres o cuatro días recomiendo a mis pacientes un reposo relativo, pasados esos días se pueden incorporar al trabajo o a su vida normal, evitando realizar deportes que nos obliguen a correr o saltar y determinados esfuerzos físicos.
Por último, advertir que para obtener un buen resultado con todas las garantías en una intervención de cirugía plástica, es necesario asegurarse de elegir siempre y solamente médicos especialistas en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora.